Senderismo en la localidad de “Almedinilla” (Córdoba) ruta: Fuente Rivera – Venta Valero
Día 24 de noviembre 2018, a las 8:00 horas todos puntuales en c/ Góngora para iniciar esta nueva aventura de senderismo. Para esta ruta nos apuntamos 68 compañeros “32 mujeres y 36 hombres”.
Hoy salimos a nuestra hora, sin ningún contratiempo, para llegar a Almedinilla sobre las 10:15 horas se notaban las manos de nuestra conductora Lidia que es un hacha con el autocar. Paramos a la entrada del pueblo para recoger a nuestros guías Jessica, Maribel y Pedro y andandito nos fuimos a desayunar al bar Plaza que ya teníamos mucha hambre.
Terminado el desayuno, cogemos el autocar que nos llevó directamente al lugar donde iniciaríamos el senderismo, lugar donde está la cooperativa de aceite Ntrª. Señora del Carmen y entre la carretera y la cooperativa bajamos para adentrarnos en el campo directamente ¡qué alegría! el sendero comenzaba con una bajada ¡bien, bien, bien!. Olor súper intenso a campo mojado debido a las lluvias de estos días, ojito con los resbalones, a los lados del sendero teníamos cantidad de olivos salpicados con algunas encinas que nos ponían una estampa preciosa con este día tan clarito de una luminosidad increíble, sí señor, un día precioso para la práctica de esta actividad. Después de la bajada nos encontramos con que el sendero se puso plano ¡qué bien! muchas casitas diseminadas por la montaña por esta comarca Subbética cordobesa y por compañía llevábamos el río Caicena.
Terminado el tramo de sendero llano tocaba otra bajada con vistas a la falda de la montaña y con cantidad de cuevas naturales y muchísimas plantas aromáticas a un lado y a otro del sendero, pero seguíamos bajando, ya verás cuando llegue la subida, en la bajada nos topamos con una cascada de agua muy bonita llamada Salto del Caballo, allí nos echamos un montón de fotos, tanto la cascada cómo el entorno eran súper bonitos pero ¡hala! se acabó lo bueno ya teníamos allí la subida jejeje pa cagarse. Una subida muy empinada y con el suelo mojado ¡vaya tela!. Al llegar a lo alto de la subida vimos que aquel sendero se componía de subidas y bajadas constantes pero complicadas debido a lo resbaladizo del terreno y a las dimensiones del sendero más menos un metro de ancho con la jodienda de que a la izquierda había unos terraplenes de aúpa así caminamos un buen trecho, nos encontramos con unas ruinas y Pedro nos comenta que en sus tiempos aquello fue un gran molino. Hala seguimos andando y al fondo del sendero se veía una carreterita que según Pedro nos llevaría, después de unos buenos kilómetros, a todo lo alto del pueblo. Llegó un momento donde dejamos la carretera y bajamos por un sendero también bastante pendiente y difícil para llegar a Almedinilla.
Sobre las 13:30 horas, después de una pechá de andar, llegamos al pueblo y nos dirigimos al Museo Histórico donde nos encontramos una concentración de coches Mercedes muy antiguos y muy bonitos.
En el museo se reagrupó el grupo y Pedro comentó que se podía hacer otro tramo de senderismo más técnico y difícil del que hicimos. Los valientes siguieron andando y otros nos dirigimos al pueblo para tomar alguna cosilla antes de almorzar. Personalmente mi rodilla dijo ¡hasta aquí hemos llegao!.
Ya en el pueblo Jessica nos llevó a otro salto de agua que hay en el mismo pueblo y que por su altura y entorno hacen un lugar digno de visitar ¡muy bonito!.
A las 14:30 llegamos al restaurante Los Cabañas, en el mismo Almedinilla y a esperar a los valientes para comer. Comimos, sacamos la bota de vino y echamos un buen rato para sobre las 17:00 horas vuelta a casa donde se llegó a las 19:00 horas más o menos.
Día intenso de senderismo con momentos muy bonitos y graciosos que disfrutamos durante todo el día.
¡¡¡Hasta otro día compañeros!!! A. Abu
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Senderismo Viernes 09 de Noviembre de 2018.
Ruta: Cartajima – Júzcar.
A las 8:00 horas todos puntuales en c/ Góngora para iniciar esta nueva aventura de senderismo pero debido a unos problemas logísticos hubo que retrasar la salida hasta las 9:30 horas, una vez solucionado el problemilla nos pusimos en marcha. A esta ruta de senderismo nos fuimos 58 compañeros “37 mujeres y 21 hombres”.
Hoy para cambiar tenemos a una conductora Gertrudis, una mujer encantadora, pues nada, pillamos la carretera y adelante. Hicimos una parada en Cártama para recoger a nuestro guía de hoy Paco (un súper barbudo tipo fray Leopoldo) y seguimos el viaje. Decir que amaneció un muy buen día que todos agradecimos, antes de llegar a Ardales nos encontramos con algunos destrozos en la carretera y en los campos ocasionados por esas fuertísimas lluvias caídas días antes por toda esa zona y que están en reparación. Llegamos a Ardales y paramos a desayunar en el Venta el Cruce sitio recomendado para desayunar pues te ponen un mollete y una zurrapilla de lo mejor que puedes encontrar.
Conforme nos acercabamos al Valle del Genal el paisaje se transformaba en un bosque cerrado de castaños con ese color dorado tan bonito que tienen en esta época del año, una postal maravillosa. Entorno precioso aunque la carretera era estrechita y el autocar muy grande. Nuestro guía Paco nos comenta que por aquellos lares cuando los castaños están de ese color le llaman la “primavera del cobre”.
A las 12:00 horas llegamos a Cartajima, pueblo encantador muy de montaña allí nos dejó Gertrudis y nos dispusimos a comenzar la ruta de senderismo, cruzamos el pueblo y pasamos junto al Ayuntamiento y la Iglesia del Rosario para adentrarnos en el campo que como antes comenté es todo un bosque de castaños interminable, pues nada, comenzamos la senda y llegamos a un punto donde nos encontramos con una bajada bastante larga con un piso así así porque estaba húmeda y había riesgo de resbalón pero somos ya unos expertos senderistas. El personal no perdía el tiempo, todos recogiendo castañas pues aunque ya las habían recogido de los árboles había una pechá de ellas por todos lados del camino, castaña y a la bolsa, castaña y a la bolsa unas castañas bastante gorditas las jodidas.
De impresión el sendero, no podía ser más bonito con toda esa súper extensión de castaños y ese sol que se colaba por ellos, muy bonito el panorama. Pasamos por una zona llamada el “castañar” donde nos hicimos una pechá de fotos y seguimos bajando hasta que nos encontramos con que teníamos la subida a la vista y, si la bajada fue larga, la subida era más larga todavía, una cuesta arriba larguísima con el suelo todo descarnado por la acción de esas lluvias torrenciales caídas días atrás, así que sube que te sube y después de un ratazo subiendo hicimos cumbre ¡aleluya! Pero mentira al dar la curva seguía esa maldita cuesta arriba, andamos un ratito más y llegamos a la carreterita que nos llevaría a Juzcar una carreterita que por suerte era llana ¡menos mal!.
Cruzamos la carretera y sobre las 14:00 horas nos dimos de lleno con Júzcar el pueblecito de los pitufos todo pintado de azul y que desde arriba se veía muy bonito, precioso el pueblo sí señor, dimos un paseo, nos hicimos fotos con los pitufos y a comer al Restaurante el Bandolero (por cierto que al cocinero se le fue la mano con el pique en el potaje y manda cojones como estaba aquello). No hay quien pueda con nosotros nunca nos venimos abajo, al mal tiempo buena cara, así que saque la bota de vino que llevaba en la mochila ya veréis las fotos, todos nos hartamos de vinillo bueno, la bota terminó estrujá y nosotros nos hartamos de reír.
En esta etapa de senderismo hubo que recortar la senda que discurría por la localidad de Faraján debido al retraso que tuvimos en la salida.
Ya listos del todo, a las 17.00 horas cogimos el autocar y para casa después de echar un precioso día de senderismo. Llegamos a Málaga sobre las 19:00 horas y todos para casita.
Día intenso de senderismo con momentos muy bonitos y graciosos que disfrutamos durante todo el día.
¡¡¡Hasta otro día compañeros!!! A. Abu
